Andaravío…,preciosa palabra que no está en ningún diccionario, pero con la que, por lo menos por aquí, alguna gente, se refiere a los molinillos de viento.
David y María se casaron este pasado sábado, y nos pidieron una galleta para obsequiar a los invitados con esa forma. Tras varias pruebas de formas y colores, decidieron las que podéis ver en la foto, presentadas en jarrones transparentes con piedra blanca.
Así que además de ser una galleta diferente y original, seguro que los jarrones habrán lucido en el precioso restaurante que eligieron para el evento.
Desde aquí, agradecemos que hayan confiado en nosotros, y aprovechamos para desearles todo lo mejor.
Saludos a todos!